Cómo hacer panecillos de mantequilla

Los panecillos de mantequilla calientes y esponjosos suelen ser las joyas de la corona de una gran fiesta. Ya sea que estén cubiertos de mantequilla, margarina, mermelada o salsa- estas delicias ligeras y deliciosas son un gran complemento para cualquier comida. Pero no necesitas un título avanzado en cocina sureña para poder hacer estos deliciosos panecillos de mantequilla. Bastan algunos ingredientes sencillos y un apetito saludable. Aquí te decimos cómo hacerlos:

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Mide la harina y ponla en el tazón de la batidora, revuélvela bien hasta que te asegures de que no tenga grumos.

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Agrega el azúcar, la sal, el bicarbonato de sodio y el polvo para hornear. Revuélvelos bien.

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Corta la mantequilla fría en secciones y revuélvela en la mezcla de la harina (ya sea con un utensilio para mezclar o con tus manos).

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Haz un pequeño hoyo en el medio de la mezcla de la harina y vierte la mantequilla en él.

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Mezcla la mantequilla hasta que tengas una mezcla que sea lo suficientemente sólida como para ser amasada.

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Amasa la mezcla hasta que tenga una textura suave y similar a la de la plastilina.

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Divide la masa en doce pequeños montículos de igual tamaño y aplástalos hasta que tengan alrededor de ½ pulgada de grosor. Para tener panecillos perfectamente redondos, utiliza un cortador de galletas.

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Coloca los panecillos crudos en una bandeja para hornear engrasada.

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Ponlos en el horno y hornéalos por alrededor de 15 minutos o hasta que los panecillos estén ligeramente dorados.

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¡Sirve y disfrútalos!