Cómo generar energía eléctrica

Comienza de a pocos. Al principio solo compra uno o dos paneles solares. Es posible instalarlos por etapas, de modo que no gastes una fuerte cantidad de dinero de una sola vez. Muchos sistemas conectados a la red eléctrica pueden expandirse- esto es algo que debes verificar cuando realices la compra. Consigue un sistema que pueda crecer a la par con tus necesidades.

Aprende a darle mantenimiento a tu sistema. Al igual que con cualquier otra cosa, si no cuidas de tu sistema de paneles, se averiará. Decide cuánto tiempo debe durar, Ahorrar un poco de dinero ahora puede costarte mucho más en el futuro. Invierte en el cuidado de tu sistema y este cuidará de ti.

Determina el tipo de sistema que quieres. Considera si quieres un sistema de energía autónomo o uno conectado a una red eléctrica. Un sistema autónomo es lo último en sostenibilidad y sabrás el origen de cada vatio que utilices. Un sistema conectado a una red eléctrica te brinda una estabilidad y redundancia, además de proveerte una oportunidad para revender electricidad a una compañía eléctrica. Si estás conectado a una red eléctrica pero administras tu uso energético como si usaras un sistema autónomo, incluso puedes generar un pequeño ingreso extra.

Infórmate sobre los generadores micro-hidroeléctricos. Existen varios tipos de tecnologías micro-hidroeléctricas disponibles que van desde una hélice casera conectada a un alternador de auto hasta sistemas bastante robustos e intrincadamente desarrollados. Si vives en la orilla de un río, podría ser una solución eficaz y autónoma.

Prueba un sistema combinado. Siempre puedes combinar cualquier de estos sistemas para garantizar el suministro de electricidad durante todo el año y que sea suficiente para tu uso doméstico.

Considera usar un generador independiente. Si no cuentas con una red eléctrica o quieres tener una medida de seguridad en caso de desastres o apagones, podrías necesitar un generador. Los generadores pueden funcionar con diversos tipos de combustible y están disponibles en varios tamaños y capacidades.

Evita los sistemas a base de cogeneración. Los sistemas de cogeneración o de calor y electricidad combinados (CHP, por sus siglas en inglés), que generan energía a partir del calor producido mediante el vapor, son antiguos e ineficaces. Si bien hay personas que prefieren estos sistemas, es mejor que los evites.

Realiza una investigación. Si te interesa un producto en específico, lleva a cabo comparaciones de precios en Internet antes de hablar con un vendedor.

Solicita consejo de un experto. Pídele a alguien en quien confíes que te ayude a tomar decisiones. Hay vendedores que se preocupan por tus beneficios y hay otros que no. Busca comunidades de bricolaje y similares para obtener consejo que no sea de alguien que quiere venderte algo.

Investiga los incentivos. Cuando realices tus compras, no olvides preguntar por los programas de incentivo locales, estatales y federales. Existen muchos programas que subvencionarán el costo de tu instalación o te brindarán exenciones tributarias significativas por utilizar energía ambiental.

Solicita ayuda cualificada. No todos los contratistas o empleados de servicios están debidamente calificados para instalar estos sistemas. Solo trabaja con vendedores experimentados y especialistas en instalación que tengan permiso para trabajar con el sistema que has elegido.

Entabla amistad con un profesional en el mantenimiento de energía alternativa. Si el mantenimiento es más difícil de lo que esperabas, no dudes en pedirle ayuda.

Piensa en un plan para obtener energía de reserva. Los elementos naturales que utiliza un sistema de energía autónomo no son confiables. El sol no siempre brilla, el viento no siempre sopla y el agua no siempre fluye.

Infórmate acerca del almacenamiento de energía. Una solución común para el almacenamiento de energía autónoma es el uso de baterías plomo-ácido de ciclo profundo. Cada tipo de batería necesita una clase distinta de ciclo de carga, así que asegúrate de que tu regulador de carga corresponda a dicho tipo y que esté configurado correctamente.

Calcula la cantidad de baterías que necesitarás. El almacenamiento de ciclo profundo se clasifica en amperio-hora (Ah). Si quieres obtener el valor aproximado de kilovatio-hora (KWH), multiplica los amperios-horas por el número de voltios (12 o 24 voltios) y divídelo por 1000. Para obtener el valor de amperios-horas a partir del valor en kilovatios-horas, solo multiplícalo por 1000 y divídelo por 12. Si tu consumo diario será de 1KWH, necesitarás alrededor de 83 Ah de 12 voltios de almacenamiento, pero luego necesitarás 5 veces esa cantidad (teniendo en cuenta que nunca querrás descargar más del 20%) o aproximadamente 400 Ah para distribuir esa cantidad de electricidad.

Elige el tipo de tu batería. Hay muchas clases distintas de baterías y es importante que elijas la más apropiada para ti. Saber lo que funcionará y lo que no hará una gran diferencia en lo que respecta a proveer de energía a tu hogar.

Ten baterías aun cuando tengas un generador. Incluso con un generador, las baterías son necesarias en un sistema independiente. Recargar las baterías ejercerá una carga razonable en el generador para que funcione eficazmente de acuerdo al combustible que consume, mientras que encender únicamente las luces supondrá cargas mayormente pequeñas, algo que la mayoría de generadores no manejan muy bien.