Cómo arreglar los problemas comunes al preparar injera

Si no puedes encontrar una masa de masa fermentada, ordénala en línea o haz una tú mismo. En realidad no es difícil y cualquier masa fermentada funciona para la injera.

Si no tienes una mitad, utiliza una sartén vieja y simple. Pero ten en cuenta que si vas a utilizar una sartén con bordes que forman curvas hacia arriba, esto podría hacer que sea muy complicado sacar la injera de la sartén. Soluciona esto simplemente haciendo injeras más pequeñas del tamaño de un panqueque, de manera que tengas espacio para deslizar fácilmente el panqueque para sacarlo de la sartén.

Arregla un desastre con la injera. Si se vuelve una masa pegajosa al intentar sacarla de la sartén, hay dos cosas que podrían haber salido mal.

Si tu injera está quemada al fondo, pero aún pegajosa en la parte superior, esto probablemente significa que estás calentando mucho la sartén. Baja el fuego unos cuantos grados. También ten en cuenta de que la injera tiende a ser pegajosa mientras aún está tibia. Prueba dejándolo enfriar completamente y ve si te gusta más esa textura.

Si tu injera no tiene burbujas, esto querría decir que amasar la masa afecta el contenido de burbujas, y la levadura tiene mucho que ver con eso. Prueba agregando un poco de levadura a tu masa y ve si mejora. Si no, podrías necesitar probar amasando más la masa la siguiente vez.

Si tu injera sabe raro. La injera es tan solo una masa fermentada plana hecha con tef. Así como la masa fermentada, varios factores diferentes pueden afectar el sabor de tu pan. Si la injera no sabe lo suficientemente amarga, entonces podría haber habido algo mal en tu masa. Huélela para ver si tiene un olor a levadura. Si no es así, podrías necesitar probar nuevamente. Si huele así, fácilmente puedes hacer que tu injera sepa más amarga agregándole unas cuantas tandas de levadura y aumentando la cantidad de masa que le pones a tu receta. Además, prueba poniéndole un poco menos de agua a tu masa cada vez que la alimentes, ya que generalmente se sabe que esto resulta en una masa fermentada más amarga. Finalmente, puedes dejar que tu injera repose más tiempo, para aumentar el sabor amargo.

Si tu injera tiene grietas, rajaduras o roturas profundas, esto podría ser porque estás utilizando una harina de trigo integral. Además, esas grietas profundas pueden ser el resultado de no cubrir apropiadamente la injera mientras se cocina. Prueba utilizando una cubierta, y nota la diferencia en la textura de la superficie. Finalmente, podría ser que tu masa es muy gruesa o que estás vertiendo demasiada masa a la sartén. Dilúyela un poco con agua o intenta usar menos, y ve si esto no te da una mejor textura.