Cómo mejorar la calidad del habla

Si balbuceas mucho cuando hablas o te das cuenta de que las personas no entienden la mayor parte de lo que dices, entonces puedes seguir los siguientes pasos para mejorar la claridad de tu discurso. En caso de que tengas que dar un discurso, de que tu trabajo requiera que hables en público o simplemente quieras mejorar tu discurso de manera general, existen varios métodos que puedes usar para hablar más claro.

Pasos

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No te apresures al hablar. Habla libremente, pero no tan lento como parecer un robot.

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Traga el exceso de saliva. La saliva que queda en la boca puede causar balbuceo o distorsión en las consonantes, como la “S” o “K”.

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Debes saber lo que vas a decir. En caso de que estés dando un discurso o tengas una conversación casual con un amigo, tómate al menos un momento antes de hablar para que sepas lo que vas a decir porque esto ayudará a que hables con claridad y evitará que hables muy rápido.

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Practica caminando. Si tienes que hablar en público y tienes alguna presentación, probablemente tendrás apuntado un esquema de tu discurso. Practica tu discurso caminando alrededor.

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Repite las palabras que son difíciles de decir. Cuando tenemos problemas para pronunciar algunas palabras usualmente hablamos más rápido y nos trabamos al decirlas, lo que termina enredando el discurso. Practica diciendo en voz alta estas palabras una y otra vez hasta que crees una memoria muscular pronunciándolas correctamente.

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Lee en voz alta. Si estás leyendo un libro o incluso las noticias por la mañana, practica leyéndolos en voz alta. Hacerlo te ayudará a que te familiarices con el sonido que haces al hablar. Con frecuencia, cuando hablamos realmente no nos escuchamos a nosotros mismo ni cómo sonamos. Cuando lees algo en voz alta en la comodidad de tu casa puedes comenzar a escucharte y a prestar atención a las partes en las que no hables claro.

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Practica hablando con un corcho en la boca. Muchos actores y actores de voz (o doblaje) usan este ejercicio para aumentar la claridad y la dicción sobre todo si se trata de algo como Shakespeare. Al colocarte un corcho entre los dientes y hablar en voz alta, estarás entrenando tu boca para que realice verdaderamente un mayor esfuerzo al pronunciar cada silaba. Además, el corcho también impedirá que tu lengua se tropiece con algunas palabras.

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Préstale atención a tu tono. El tono también interviene en la claridad y la dicción ya que puede afectar cómo pronuncias algunas palabras.

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Evita el tono exagerado. Usar un tono exagerado es un hábito desagradable respecto a finalizar las oraciones con una inflexión en subida, como si pareciera una pregunta.

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Cuida tu postura. Así como la respiración, la postura juega un papel muy importante en la claridad de tu discurso y es algo que algunas veces olvidamos pero debemos tener en cuenta.

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Calienta tus cuerdas vocales. Los ejercicios de calentamiento de cuerdas vocales prepararán tu voz y te relajarán para que puedas hablar de manera clara y eficaz.

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Evita hablar entre dientes.

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Mantente hidratado. Tus cuerdas vocales son como una máquina que necesita estar bien aceitada. Haz gárgaras de agua tibia con una pizca de sal para mantener tus cuerdas vocales preparadas. Esto ayuda a aliviar la tensión en la garganta.