Cómo ingresar a la Escuela de Leyes de Harvard

La Escuela de Leyes de Harvard siempre ha sido una de las mejores escuelas de leyes de los EE.UU., ya que proporciona una excelente formación en derecho y cuenta con un profesorado cuya experiencia legal es invaluable y con un alumnado que proviene tanto de los EE.UU. como del resto del mundo, lo cual le da una gran diversidad. Lo que es más, si bien la situación de los egresados de Derecho en el mercado actual es bastante difícil, más del 95 % de los egresados de la Escuela de Leyes de Harvard logran conseguir trabajo en el espacio de 10 meses después de graduarse a un sueldo promedio de $120 983 al año (según las cifras correspondientes a la promoción del año 2014). Sin embargo, es una institución muy competitiva: de hecho, para la cohorte del año 2014, hubo 5973 postulantes, de los cuales solo 918 fueron aceptados. Por tanto, si quieres ser un buen candidato, debes reforzar tu currículum, obtener una puntuación alta en el examen LSAT, redactar una excelente declaración personal y dar una muy buena impresión en la entrevista.

Pasos

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Presenta la solicitud relativamente pronto. La Escuela de Leyes de Harvard acepta solicitudes en cualquier época del año, por lo que obtendrás una ventaja si presentas la tuya con cierta anticipación antes de que se llenen todas las vacantes. Por lo general, el periodo de solicitud correspondiente al año actual empieza a finales de septiembre, por lo que este (o poco después) es el mejor momento para presentar la tuya.

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Llena la solicitud en línea. Este proceso se realiza en el sitio web del Consejo de Admisiones a Escuelas de Derecho (LSAC, por sus siglas en inglés). Te conviene iniciar el proceso pronto, ya que deberás conseguir cartas de recomendación, tomar el examen LSAT con anticipación y asegurarte de presentar la mejor declaración personal y la mejor versión de tu currículum que puedas. La solicitud comprende 7 partes obligatorias:

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Incluye también una declaración de diversidad si aplica. La Escuela de Leyes de Harvard siempre se ha esforzado para que su alumnado sea lo más diverso posible, por lo que presentar también una declaración de diversidad te permitirá contextualizar tus logros en tu trasfondo y, de esta forma, demostrar que serías una importante contribución a los objetivos de diversidad de la institución.

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Incluye una adenda. Es una buena idea adjuntar una adenda a tu solicitud para explicar las posibles discrepancias (como una alta calificación en el LSAT a pesar de tener un promedio bajo) de forma que presentes como fortalezas lo que podrían parecer debilidades. Por ejemplo, puedes abordar directamente tu promedio bajo explicando que te fue difícil mantener buenas calificaciones en la universidad debido a que trabajabas para pagarte los estudios y estabas involucrado en actividades extracurriculares (como practicar deportes o ser miembro del consejo estudiantil o del equipo de debates, etc.) pero que todas estas experiencias te enseñaron lecciones valiosas.

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Completa tu formación con cursos electivos. Si bien la Escuela de Leyes de Harvard suele aceptar a estudiantes de trasfondos muy variados, una forma de asegurarte de que te acepten es tomando cursos que te ayuden a desarrollar tus habilidades de lectura, investigación y escritura. Por ejemplo, si estudias Economía y tienes experiencia con la investigación y el análisis de datos, también debes tomar cursos electivos relacionados con la historia y la literatura para demostrarle al comité de admisiones que también tienes buenas habilidades de lectura y escritura. Estos son algunos tipos de cursos que puedes tomar:

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Obtén buenas calificaciones. Harvard es una institución que impone estándares muy altos a sus estudiantes. Por ejemplo, si provienes de una universidad de los EE.UU., un promedio de 3,75 no te servirá de mucho, ya que solo te ubicará dentro del percentil 25 (es decir, que solo serás mejor que el 25 % de los demás postulantes). Asimismo, un promedio de 3,87 te ubicará dentro del percentil 50 y apenas podrás ingresar al percentil 75 con un promedio de 3,95.

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Mejora tu promedio tomando cursos de verano. Si tu promedio no es suficiente para dar una buena impresión, puedes subirlo un poco tomando cursos de verano antes de tu último año de la universidad. Incluso una diferencia de 0,1 o 0,2 puede ser lo único que necesites para pasar a la siguiente ronda del proceso de solicitud.

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Participa en las actividades extracurriculares adecuadas. Lo más probable es que casi todos los postulantes tengan promedios altos y muy buenas calificaciones en el examen LSAT, por lo que una buena forma de distinguirte de los demás es por medio de las actividades extracurriculares, sobre todo si tu propio promedio y tus propias calificaciones en el LSAT no son tan buenos. Por tanto, debes involucrarte pronto, ya que no impresionarás a Harvard si apenas empiezas a participar durante tu último, y tener en cuenta que es mejor calidad que cantidad. Es decir, elige entre 1 y 3 actividades extracurriculares en las cuales participar y realmente comprométete con ellas. Estos son algunos ejemplos:

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Estudia en el extranjero. Si bien puedes encontrar programas específicos relacionados con las carreras en Derecho, los estudios en el extranjero, independientemente del enfoque, te darán una gran ventaja en tu solicitud, ya que Harvard valora la experiencia cultural y la competencia en los idiomas extranjeros que te brinda la experiencia de estudiar fuera.

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Ofrécete como voluntario para organizaciones comunitarias y sin ánimo de lucro. Aprovecha el tiempo después de terminar tus estudios de pregrado para reforzar la sección de actividades extracurriculares de tu currículum, sobre todo si no tuviste una buena participación en ellas mientras aún estabas en la universidad. En el caso de los voluntariados, lo mejor es involucrarte con organizaciones prestigiosas nacionales pero, en realidad, te servirá cualquier puesto que demuestre tu compromiso y tus habilidades de liderazgo y en el cual puedas producir resultados tangibles. Incluso podrías inscribirte para trabajar a tiempo completo en organizaciones como Teach For America, el Cuerpo de Paz o AmeriCorps.

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Toma cursos universitarios de educación continua. Esta es una buena forma de mostrar tu madurez como estudiante, sobre todo si hace mucho tiempo que te graduaste de la universidad. Ten en cuenta que, mientras más prestigiosa sea la universidad en donde tomes estos cursos, tus calificaciones tendrán un mayor peso.

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Obtén un título de posgrado. Si bien estos títulos son costosos (a menos que estudies con una beca), son una forma excelente de ingresar a la Escuela de Leyes de Harvard, por lo que la inversión podría valer la pena. Además, un título de posgrado podría brindarte una serie de beneficios, sobre todo si lo obtienes en una institución prestigiosa:

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Conoce la calificación necesaria para aprobar. Para aprobar el LSAT, necesitas obtener una calificación de entre 120 y 180, aunque solo podrás ingresar a Harvard con una calificación de por lo menos 170. Por ejemplo, en el caso de la cohorte que ingresó a Harvard en el año 2014, una calificación de 170 correspondía al percentil 25, mientras que una calificación de 173 correspondía al percentil 50 y una calificación de 175 correspondía al percentil 75.

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Familiarízate con el examen. Ten en cuenta que lo que se evalúa en el LSAT no es lo que sueles aprender en los cursos en la universidad sino que está más enfocado en la lógica, las habilidades lingüísticas y la comprensión lectora. El examen está compuesto por cinco secciones de preguntas de opción múltiple que tienen una duración de 35 minutos cada una. De estas secciones, solo cuatro cuentan para tu calificación, mientras que la quinta solo tiene el propósito de poner a prueba algunas preguntas para incluirlas en exámenes futuros. Asimismo, también deberás presentar una muestra de escritura, para lo cual también tendrás 35 minutos. Estos son los diferentes tipos de preguntas con los que te encontrarás:

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Empieza pronto tu preparación. No es suficiente estudiar durante una o dos semanas sino que la mayoría de las personas necesitan meses de preparación intensa (alrededor de entre 15 y 20 horas a la semana). Como mínimo, debes conseguir exámenes anteriores, los cuales puedes comprar en el sitio web de LSAC, así como también una guía de estudio. Si estos recursos no son suficientes para obtener tu calificación deseada, también puedes inscribirte en un curso de preparación para el LSAT o contratar a un tutor.

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Elige un curso de preparación adecuado. Si optas por inscribirte en un curso de preparación, debes asegurarte de hacer valer tu dinero. Por tanto, busca cursos cuyos profesores hayan obtenido como mínimo una calificación de 170 y cuyo material de estudio incluya preguntas que provengan de exámenes verdaderos. También debes asegurarte de inscribirte en el curso con bastante anticipación a la fecha en la que planees dar el examen (por ejemplo, considera prepararte durante por lo menos dos meses). Estos son algunos de los mejores cursos de preparación para el LSAT (averigua si están disponibles en el lugar en donde vivas):

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Vuelve a dar el examen si es necesario. Puedes tomar el examen hasta tres veces en dos años y, como sucede con la mayoría de las escuelas de leyes, Harvard solo tomará en cuenta la calificación más alta que hayas obtenido. Por tanto, es recomendable volver a tomarlo si no estás satisfecho con tu calificación, ya que, si obtienes una mejor, esa será la que Harvard considerará y, si obtienes una calificación menor, Harvard utilizará tu calificación original.

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Elige un tema que no sea demasiado amplio. Es decir, no trates de resumir toda tu vida en un solo ensayo sino que debes enfocarte mejor en una sola experiencia influyente y explicar de qué manera te afectó, enfatizando tus fortalezas como candidato.

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Engancha al lector. Debes enganchar al lector desde el primer párrafo para asegurarte de que continúe leyendo. Por tanto, puedes empezar con una afirmación que refleje tus valores o algo que sea importante para ti, como "Creo en la libertad de expresión", seguida de una historia mediante la cual expliques por qué y la relación que esta afirmación tiene con tu solicitud. También puedes empezar con una oración que introduzca la historia que vayas a contar, como "Nunca pensé en lo que realmente significa ser ciego hasta que conocí a mi mejor amigo Juan".

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Sigue las indicaciones tradicionales de la escritura en cuanto a mostrar y no contar. Es mucho más efectivo plasmar una escena vívida para ilustrar tu argumento que simplemente definirlo. Por ejemplo, si te apasiona el derecho migratorio, en lugar de solo decirlo o mencionar que tuviste una pasantía relacionada, darás una mejor impresión si cuentas una historia sobre alguna experiencia que hayas tenido con un inmigrante.

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No te enfoques en una sola rama del derecho. No debes ser demasiado específico (a menos que estés seguro de que vayas a dedicarte al derecho de patentes, ya que obtuviste un doctorado en Investigación Médica). El objetivo de las escuelas de leyes es permitirte explorar una gran cantidad de ramas del derecho y así elegir la más adecuada para ti.

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Investiga bien. Si quieres especificar las razones por las cuales hayas elegido a Harvard, debes proporcionar datos correctos. Por ejemplo, si quieres trabajar con algún profesor en particular, no lo menciones en tu declaración a menos que sepas con certeza que sea un profesor titular.

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Revisa bien. Asegúrate de leer varias veces tu declaración personal para que no se te escape ningún error, así como también de pedirles a otras personas que la lean. Ten en cuenta que un solo error de gramática u ortografía podría afectar negativamente la impresión que des al comité de admisiones.

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Viste ropa cómoda. Las mujeres suelen usar blusas y los hombres camisas con corbata, aunque no hay problema si te es más cómodo usar un traje completo o una vestimenta informal de negocios. Lo principal es que te sientas cómodo para poder estar relajado y dar una buena entrevista.

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Ordena tu entorno. Todo lo que pueda verse detrás de ti debe estar bien ordenado, ya que el desorden tendrá un impacto negativo en tu desempeño en la entrevista. También puedes reforzar tu imagen como estudiante dedicado colocando ciertos libros en las estanterías que sean visibles.

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Prepárate, pero haz que la entrevista parezca una conversación. No debes sonar como si estuvieras recitando de un guion, ya que esto no es lo que busca el comité de admisiones. Por tanto, no memorices nada pero sí prepara una estructura básica de tus respuestas a algunas preguntas típicas, como las siguientes:

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Evita repetir lo que figure en tu currículum. Las entrevistas se llevan a cabo para conocerte mejor como persona, no para enfatizar tus logros. Por tanto, no debes repetir cosas que ya hayas mencionado en tu currículum o en tu declaración personal, ya que dar la impresión de ser inteligente, curioso y divertido te asegurará un mejor desempeño.

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Haz preguntas inteligentes. El entrevistador a la larga te preguntará si tú tienes preguntas, por lo que debes preparar algunas con anticipación. Además, asegúrate de no simplemente hacer preguntas cuyas respuestas podrías haber encontrado en el sitio web de Harvard, ya que se espera que hayas investigado tú mismo a la universidad antes de la entrevista. Por ejemplo, en lugar preguntar "¿Qué tipo de oportunidades ofrecen para obtener experiencia práctica?", puedes preguntar "Me interesan mucho los consultorios jurídicos relacionados con el derecho de transacciones comerciales. ¿Puede explicarme cómo funcionan y de qué forma utilizan lo que se aprende en las clases?". De esta forma, no solo obtendrás la información que deseas sino que también les demostrarás que eres una persona inteligente e inquisitiva.