Cómo evitar cálculos renales en los perros

Muchas veces, a los perros les sale cálculos renales cuando su orina alcanza una alta concentración de sales minerales, que provienen de la orina. Estas sales minerales forman un cálculo en el tracto urinario o en los riñones. Los cálculos renales también pueden ser producto de infecciones del tracto urinario, infecciones renales, medicamentos, la edad, la dieta o de su raza. También se les conoce como “nefrolitiasis” o “urolitos”. El primer término se refiere a los cálculos en los riñones y el segundo a los del tracto urinario. Conociendo más sobre lo que aumenta las probabilidades de que tu perro sufra de cálculos renales, podrás tomar las medidas respectivas para ayudarlo a evitarlos.

Pasos

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Dale a tu perro la cantidad correcta de agua todos los días. La cantidad de agua que un perro necesita por día depende de su peso corporal. Un perro necesita aproximadamente 30 ml (1 oz) por ½ kg (1 libra) de peso al día. Por ejemplo, un perro de 3,5 kg (8 libras) necesitará 1 taza de agua por día y un perro de 35 kg (80 libras) necesitará 10 tazas de agua por día.

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Añade agua a la comida del animal si no bebe el agua suficiente. Si tu perro se reúsa a tomar agua o crees que no bebe el agua suficiente durante el día, puedes tratar de añadir agua tibia a sus alimentos hasta que obtengan la consistencia de estofado. También puedes añadirle alimentos enlatadas húmedos para que consuma más agua.

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Deja que tu perro orine seguido. Un perro adulto saludable debe tener la oportunidad de orinar cada 6 a 8 horas. Los perros más pequeños, los cachorros o los perros con problemas médicos en el tracto urinario necesitan orinar más seguido, como mínimo cada 4 horas.

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Sigue las recomendaciones alimentarias de tu veterinario. Si tu perro es proclive a tener infecciones del tracto urinario o se le han diagnosticado cálculos renales en el pasado, tendrás que seguir las recomendaciones alimentarias de tu veterinario. Esta persona recomendará una dieta especial (con premios especiales también) para ayudar a prevenir la reaparición de cálculos renales.

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Consulta con un experto en nutrición animal si preparas la comida del perro desde cero. Si le da a tu perro una dieta casera, habla con un experto en nutrición animal para asegurarte de que los niveles de vitaminas y mineral de la dieta estén balanceados. Un desequilibrio mineral (especialmente de calcio y fósforo) puede causar problemas renales en un perro.

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Prueba darle suplementos para la salud del tracto urinario. Hay suplementos para perros que ayudan a la salud del tracto urinario. Entre ellos están los extractos de arándanos, conocidos por ser beneficiosos. Los arándanos ayudan a evitar que las bacterias de la orina se adhieran a la cubierta del tracto urinario.

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Conoce cómo se forman los cálculos. Los cálculos renales son el resultado de los minerales encontrados en la orina. El riñón es el órgano del cuerpo que produce orina. En algunos casos, mientras la orina se forma, los minerales que deben disolverse en la orina no se disuelven. En su lugar, empiezan a formar una especie de piedritas, o cálculos.

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Conoce sobre los efectos de los cálculos renales. Los cálculos pueden bloquear el flujo de orina del perro y si son muy grandes, pueden inflamarlos. La obstrucción de la orina puede producir una enfermedad grave o incluso la muerte, por eso es crucial que te comuniques con tu veterinario de inmediato si sospechas que tu perro tiene un cálculo.

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Recuerda que algunas razas son más susceptibles a la aparición de cálculos. Ciertas razas son más susceptibles que otras. Es bueno saber si tu perro es de una de las siguientes razas para que puedas estar atento a los síntomas:

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Conoce los tratamientos habituales para los cálculos renales. Si crees que tu perro tiene un cálculo, tendrás que llevarlo al veterinario cuanto antes. No esperes a que los cálculos empeoren más. Los tratamientos varían según la gravedad de los cálculos. Pueden consistir en medicamentos, cambios en la dieta e incluso puede ser una cirugía.