Cómo enfrentar a tu madre con respeto

Tener una relación mutua de respeto y satisfacción con tu mamá mientras vas creciendo no siempre es fácil. Sin embargo, si puedes construir una relación sólida con ella, descubrirás que tiene sus recompensas hablar y estar más unidas. Lo más importante que debes hacer es estar de acuerdo y disentir. Nada resulta de las discusiones cíclicas y sin sentido.

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Aprecia las cosas que tu madre (o tus padres) hacen por ti. Se tomaron el tiempo para criarte y darte cosas. Asegúrate de agradecérselo cuando hagan algo lindo por ti. Esto le hará saber a tu mamá que la aprecias.

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Identifica cuándo alejarte de una conversación que podría volverse tóxica. Si sientes que se está elevando la tensión, di que estás al tanto de su opinión, y simplemente márchate. Asegúrate de separarte físicamente de la tensión- ve a caminar, a pasear en bicicleta, o a tu habitación para escuchar música. Respira hondo para calmarte.

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No compartas todo con tu mamá. Si sabes que la irrita la cantidad de dinero que gastas en tu auto, no lo menciones en la conversación. Comprende que ella nunca comprendería tu punto de vista sobre ciertos temas, entonces, evítalos. Esto no se ajusta a temas que deben discutirse, como los hijos, esposos, el abuso u otros problemas familiares serios.

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Acepta para disentir. Sin importar qué, tu mamá siempre creerá que sabe qué es mejor para su bebé… tú siempre serás su bebé. Dile que tiene derecho a una opinión propia, pero que tú opinas diferente. Incluye una afirmación del tipo "Gracias por tu consejo, mamá, pero decidí que tener hijos no se ajusta a mi plan de vida". Expresar tu opinión de un modo calmo le hará sentir que no estás atacando la suya.

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Toma tu espacio cuando lo necesites. Si sabes que tu mamá necesita unos días para recuperarse de una discusión, no la presiones a hablar demasiado pronto. Eso podría hacer que las tensiones sigan subiendo.

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Si decides que ciertos asuntos sean privados, mantenlo así. Incluso si necesita que discutan un asunto privado, dile con gentileza que no quieres hablar de eso. Si te mantienes firme, podría sentirse frustrada al principio, pero pronto se dará cuenta de que su intromisión es en vano.

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No dejes que tu madre te insulte, ni siquiera durante una discusión. No está bien que te digan cosas crueles, incluso si es tu madre. Algunos límites no deberían cruzarse nunca. Muéstrale a tu madre el mismo respeto, y abstente de insultarla.

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Si sientes que los servicios de consejería, las conversaciones con tu madre u otros métodos para aprender a llevarte bien no están funcionando, intenta buscar situaciones de vida alternativas lo antes posible. Esto puede ser algo temporal o permanente. Recuerda que si te vas de tu casa, podrían no permitirte regresar (a vivir).